Este finde me he ido a Barcelona a celebrar el cumple de un amigo. Ha sido genial, he visto a gente con la que hacía un montón que no coincidía, he disfrutado de algo de sol y calorcito, me he ido de fiesta...
Y todos los allí reunidos, iban en pareja, de dos en dos..
Hasta hace poco no había pensado en que, dada mi edad, la mayoría de mis amig@s, se han multiplicado. Quiero decir, cuando quedo con "Pepe", quedo con "Pepe y María", cuando me voy de viaje, siempre somos impar: dos + dos + dos + yo!
Por suerte, la parte contratante suele caerme bien y podemos hacer "un trío" sin problemas. E incluso, el novi@ de.. se convierte en mi amig@ y cobra independencia como ser autónomo al que llamas para preguntar como está y pasa a ser uno más de tu círculo.
Reconozco que mi estado emocional óptimo, es cuando mis sentimientos y pensamientos se centrán sólo en mí. No sé si es por egoísmo, egocentrismo u otro "-ismo" peor. No significa que me guste la soledad, aunque disfruto con ella, que no tenga gente a mi alrededor por la que me preocupo y necesito, pero cuando me gusta alguien o me enamoro.. me transformo!
Sé que es normal perder algo de tu autonomía por esa persona, por adaptarse, por compartir cosas juntos.. No es que sea una "novia" agobiante, ni que me convierta en una extensión de él.. Es más de pensamiento que de acción..
Si estoy en la fase en la que te gusta un chico y parece que a él le gustas..
Me dedico a cuadrar mis planes e incluso dejar algunos que me apetecían mucho, para quedar; estoy pendiente del móvil hasta la tontería, oigo esa canción y me pongo a pensar en él; me voy de fiesta con mis amigas y no termino de disfrutar al máximo.. Y no digo nada si él dijo que iba a llamar a las 5 y no lo hace.. entonces me monto una película digna de emitirse en la sobremesa de Antena 3, me cabreo, me preocupo, me rayo.. Para que el final sea, que se quedó sin batería... Pero yo ya me he pasado dos horas echando humo por la cabeza, analizando mi estupidez de "enamorarme" y recordando lo bien que estoy sola conmigo misma..
Por eso algunas veces he intentado estar con alguien que te parece majo, que estás a gusto con él, pero que te falta la "chispa".. Otro desastre. Empiezo muy bien, por eso de la novedad, pero llega un punto en el que "canso".. me cuesta más quedar, no me sale contarle mis batallas del día y hasta me molesta que me llame! Estiro un poco la situación, por si el roce hace el cariño, pero al final, tengo que admitir que me aburro y llega la conversación incómoda en la que sueltas todos los chlichés de las rupturas..
Y ahora estoy en pleno proceso de decidir si me lanzo y lo intento con ese chico que me mola (ya empiezo a sufrir el síntoma del téléfono y las canciones) o me quedo con la tranquilidad a la que tanto me ha costado llegar (el otro día escuché a Pablo Alborán sin que se me saliera el corazón por la boca)
Tengo miedo a volver a sufrir, a "transformarme" y perder; a empeñarme en emparejarme y quizá estoy hecha para ser sólo +1. Por otro lado, quien no arriesga no vence; esa sonrisa estúpida que te sale cuando piensas en él no pasa a menudo; conectar, compartir, estar, sin necesitar nada ni nadie más, es una sensación que echo de menos..
O simplemente, sentir con menos intensidad.. Pero, como todavía no he encontrado el pedal del freno y el gris me parece un color con poco significado, no hago más que pensar si piso el acelerador o paro el coche..
Y me ha venido a la mente esta canción!!!
Sé que es normal perder algo de tu autonomía por esa persona, por adaptarse, por compartir cosas juntos.. No es que sea una "novia" agobiante, ni que me convierta en una extensión de él.. Es más de pensamiento que de acción..
Si estoy en la fase en la que te gusta un chico y parece que a él le gustas..
Me dedico a cuadrar mis planes e incluso dejar algunos que me apetecían mucho, para quedar; estoy pendiente del móvil hasta la tontería, oigo esa canción y me pongo a pensar en él; me voy de fiesta con mis amigas y no termino de disfrutar al máximo.. Y no digo nada si él dijo que iba a llamar a las 5 y no lo hace.. entonces me monto una película digna de emitirse en la sobremesa de Antena 3, me cabreo, me preocupo, me rayo.. Para que el final sea, que se quedó sin batería... Pero yo ya me he pasado dos horas echando humo por la cabeza, analizando mi estupidez de "enamorarme" y recordando lo bien que estoy sola conmigo misma..
Por eso algunas veces he intentado estar con alguien que te parece majo, que estás a gusto con él, pero que te falta la "chispa".. Otro desastre. Empiezo muy bien, por eso de la novedad, pero llega un punto en el que "canso".. me cuesta más quedar, no me sale contarle mis batallas del día y hasta me molesta que me llame! Estiro un poco la situación, por si el roce hace el cariño, pero al final, tengo que admitir que me aburro y llega la conversación incómoda en la que sueltas todos los chlichés de las rupturas..
Y ahora estoy en pleno proceso de decidir si me lanzo y lo intento con ese chico que me mola (ya empiezo a sufrir el síntoma del téléfono y las canciones) o me quedo con la tranquilidad a la que tanto me ha costado llegar (el otro día escuché a Pablo Alborán sin que se me saliera el corazón por la boca)
Tengo miedo a volver a sufrir, a "transformarme" y perder; a empeñarme en emparejarme y quizá estoy hecha para ser sólo +1. Por otro lado, quien no arriesga no vence; esa sonrisa estúpida que te sale cuando piensas en él no pasa a menudo; conectar, compartir, estar, sin necesitar nada ni nadie más, es una sensación que echo de menos..
O simplemente, sentir con menos intensidad.. Pero, como todavía no he encontrado el pedal del freno y el gris me parece un color con poco significado, no hago más que pensar si piso el acelerador o paro el coche..
Y me ha venido a la mente esta canción!!!